El Festival de Danza de Villarrobledo (Albacete), que arranca mañana miércoles, 9 de noviembre, acogerá en su programación tres espectáculos incluidos en el circuito 'Danza a Escena'. El jueves 10, la compañía de Marcos Flores mostrará con ‘Tránsito’ su particular recorrido por los palos del flamenco (20.00 horas). Un día más tarde, a la misma hora, será el turno para la danza contemporánea y los lenguajes urbanos, ingredientes con los que Mou Dansa construye su pieza 'Aproximaciones a Poble Nou'. Las localidades sueltas para asistir a esas dos propuestas salen a la venta al precio de 5 euros, aunque se ha establecido un abono para ambas por 6 euros. Por último, el sábado 12 subirá a escena el espectáculo para público familiar 'Corazón de elefante', un trabajo de la formación dirigida por la coreógrafa Marisa Amor (a las 18.00 horas), con localidades a 2 euros para niños y 4 euros para adultos.
Marcos Flores, Premio Nacional de Flamenco, ejecuta en 'Tránsito' siete piezas de distintos palos, acompañado al cante por Mercedes Cortés, a la guitarra por Jesús Núñez y a las palmas por Ana Romero. El artista firma la dirección, la producción y la escenografía de este espectáculo, que cuenta con música original del propio Jesús Núñez y José Luis Montón. El trabajo es el resultado de la experiencia del artista, que bucea en su trayectoria, y de la búsqueda de un lenguaje propio.
La compañía Mou Dansa combina en 'Aproximacions a Poble Nou' los bailes populares, la danza contemporánea y el humor, dentro de una línea de trabajo que suma aportaciones colectivas para adentrarse en diferentes estilos y mezclar ingredientes dancísticos y teatrales.
La obra, dirigida por Juan Pinillos, narra la historia de un pueblo dispuesto a asumir sus responsabilidades para propiciar cambios, con coreografía de Pinillos y Jessica Martín, quien forma parte del elenco junto a Paloma Calderón, Paula Romero Raga, Abel Martí e Isabel Abril.
'Corazón de elefante' combina movimiento y música para crear un espectáculo que demuestra las posibilidades de juego que esconden objetos cotidianos. Marisa Amor, Paloma Díaz, Óscar G. Villegas y la clavecinista Denise de la Herranz despiertan la fantasía de los pequeños espectadores con un trabajo cercano e imaginativo que va dirigido especialmente a niños de entre tres y siete años. «Se trata de compartir más que de contar, de seguir jugando», explica Marisa Amor, directora de la obra y autora de la coreografía junto a Paloma Díaz.
